Wintermute: El mercado está en ajuste, las monedas principales deben liderar las subidas

Autor: Wintermute; Fuente: X, @wintermute_t; Traducción: Shaw Finanzas Doradas

Con los ajustes en las posiciones y el regreso de algunos activos de riesgo, el tono del mercado ha mejorado. Es posible que Bitcoin necesite acercarse aún más a su máximo histórico para que las altcoins puedan rebotar y ampliar la amplitud del mercado. Las próximas noticias regulatorias y políticas en Estados Unidos serán los próximos factores clave que influirán en la volatilidad del mercado.

Actualización macro del mercado

El cambio en el tono del mercado esta semana fue más una cuestión de intensidad que de dirección. El impacto de la caída en octubre se ha disipado prácticamente y las posiciones ya se han ajustado. Aunque el rendimiento de las criptomonedas sigue rezagado respecto a otros activos de riesgo, el ambiente general parece menos vulnerable. Las noticias han jugado un papel en impulsar el ánimo. La propuesta de Trump de un plan de estímulo de 2000 dólares (a través de reembolsos arancelarios) impulsó brevemente el sentimiento de riesgo en el fin de semana, aunque luego fue reinterpretada como una reducción de impuestos, aún así cumplió su propósito: recordar al mercado que el apoyo fiscal sigue vigente. Además, el optimismo por el fin del cierre del gobierno en EE. UU. y datos macroeconómicos débiles han dado a los traders motivos para asumir riesgos selectivamente. Los activos digitales siguen siendo la categoría de activos cruzados con peor desempeño, lo que indica que el sentimiento del mercado podría estar mejorando, pero el flujo de fondos aún no ha seguido el ritmo.

El precio de Bitcoin se mantiene alrededor de 105,000 dólares, mientras que el de Ethereum ronda los 3,500 dólares. Aunque los fondos continúan saliendo de los ETF durante una semana consecutiva, ambos muestran resistencia. Las altcoins rebotaron el lunes, pero la recuperación fue muy desigual. El índice GMCI-30 cerró la semana con un aumento del 0.7%, con los sectores líderes siendo:

• DePIN: +22%
• L2s: +13%
• Medianas Capitalizaciones: +15%
• IA: +9.6%
• DeFi: +8.8%
• Utilidades: +5.9%
• L1s: -1%
• Memes: +4.6%

Este movimiento refleja el nivel actual de apetito por el riesgo. Los inversores están aumentando sus posiciones, pero en cantidades modestas. La subida del GMCI se debe principalmente a un rebote del fin de semana, no a un cambio estructural en los flujos de fondos. La amplitud del mercado sigue siendo muy estrecha, con solo unos pocos tokens (como FIL, AR, etc.) contribuyendo a la mayor parte de las ganancias. Las tendencias disruptivas aún parecen improbables, concentrándose en unos pocos sectores de momentum que son frágiles y pueden desaparecer rápidamente.

El entorno macro sigue siendo favorable. La reducción de tasas está en marcha, el proceso de ajuste cuantitativo ha finalizado y la política monetaria global sigue siendo expansiva. La tasa de financiamiento overnight (SOFR) está bajando, en línea con la tendencia de las tasas de política, aunque con cierto retraso. Sin embargo, el rendimiento de las criptomonedas difiere de otros activos de riesgo: la especulación ha disminuido, los rebotes son limitados y las rotaciones son frecuentes, con fondos prefiriendo mantener las monedas principales en lugar de las altcoins marginales.

Según la situación actual de las principales monedas, parece poco probable que las altcoins experimenten un repunte rápido. Los datos históricos muestran que, cuando las monedas principales se acercan a sus máximos históricos, las altcoins tienden a comportarse mejor, generando un efecto de derrame de riqueza. Cuando el precio de Bitcoin está entre un 10% y un 20% por debajo de su máximo histórico (actualmente en un 16%), la probabilidad de que Bitcoin supere a las altcoins es de aproximadamente 54%. Cuando Bitcoin cae cerca de los 100,000 dólares, según datos históricos, la probabilidad de que Bitcoin supere a las altcoins aumenta a aproximadamente 58%.

Esto indica que la dinámica del efecto de derrame puede cuantificarse, y también explica por qué las subidas en monedas como FIL, ICP, FET, etc., la semana pasada fueron tan frágiles, y por qué, al no recibir señales de continuación de tendencia desde Bitcoin, las ganancias se han disipado completamente.

Pero esto no significa que todas las altcoins aparte de las principales hayan desaparecido. Algunas monedas blue-chip (como HYPE, ENA, UNI, etc.) continúan superando al mercado gracias a catalizadores, beneficiándose de señales regulatorias más claras en EE. UU. y rumores de reactivación del mercado interno. Sin embargo, el mercado más amplio de altcoins sigue siendo volátil como en un mercado de opciones: tras un breve impulso alcista, sin un aumento en el precio de Bitcoin, es difícil que mantengan una tendencia fuerte. Antes de que las monedas principales recuperen el liderazgo, es difícil predecir una tendencia sostenida en las altcoins.

Nuestra opinión

Un entorno de mercado fuerte y el resurgir de la tendencia han reforzado la confianza en la continuidad de esta tendencia. La cuestión ahora es si las monedas principales podrán volver a niveles más altos, permitiendo que la amplitud del mercado se recupere.

Las posiciones se han ajustado nuevamente, el sentimiento ha mejorado y, tras semanas de volatilidad, el mercado finalmente ha encontrado un equilibrio. Aunque las criptomonedas siguen siendo la categoría de activos cruzados con peor rendimiento, el tono general del mercado ha cambiado: la caída de octubre parece haber quedado atrás y la apetencia selectiva por el riesgo está regresando. La recuperación en los sectores de DePIN, L2 y IA indica que todavía hay demanda en esas áreas, aunque la amplitud del mercado sigue siendo estrecha y la estructura del mercado, frágil.

En la próxima fase, las monedas principales deben liderar el mercado. La historia muestra que solo cuando Bitcoin se acerca a su máximo histórico, las altcoins también suben. Actualmente, Bitcoin está en torno a 105,000 dólares (un 16% por debajo de su máximo), y aún no ha desencadenado este movimiento de rotación. Esto parece más un período de transición que de estancamiento: la estructura es más clara, el entorno macro es favorable y el mercado parece preparado para volver a subir. Con la próxima publicación de noticias regulatorias en EE. UU., la próxima ola de volatilidad probablemente estará impulsada por factores políticos y regulatorios, más que por ajustes en las posiciones.