La Oficina de Estadísticas Laborales acaba de soltar una bomba: el informe del Índice de Precios al Consumo (IPC) de octubre no se publicará. Es un momento inusual que está pillando a los traders desprevenidos.

Para quienes siguen de cerca los indicadores de inflación—especialmente los inversores en criptomonedas que observan el IPC como halcones—esto crea un vacío de datos. La agencia no ha aclarado si se trata de un retraso o una cancelación, dejando a los mercados en el limbo.

¿Por qué es importante? Las cifras del IPC suelen desencadenar una volatilidad significativa en los activos de riesgo. Sin este dato, estamos a ciegas respecto a las tendencias de inflación que influyen en la política de la Fed y, por extensión, en las condiciones de liquidez para los activos digitales.

Mantente atento a cualquier comunicado oficial. A los market makers no les gusta la incertidumbre, y este silencio podría amplificar las oscilaciones de precio cuando finalmente salga el próximo lote de datos económicos.