La Reserva Federal acaba de retrasar su calendario para la recepción de comentarios públicos sobre los protocolos de pruebas de resistencia. El periodo de consultas permanecerá abierto hasta el 21 de febrero de 2026, lo que otorga a bancos e instituciones financieras más margen para opinar sobre cómo deberían evolucionar los exámenes regulatorios.

Esta prórroga indica posibles cambios en la manera en que los reguladores evalúan el riesgo sistémico en los mercados financieros. Para quienes siguen las tendencias macroeconómicas, los retrasos en los ajustes de políticas suelen reflejar debates en curso sobre los requisitos de capital y los estándares de liquidez. Las medidas de las finanzas tradicionales pueden parecer alejadas de los activos digitales, pero los marcos regulatorios bancarios a menudo sientan precedentes que acaban influyendo en la forma en que las autoridades abordan las plataformas cripto en el futuro.

Cualquiera que siga la adopción institucional debería estar atento a estos acontecimientos. Cuando los bancos centrales recalibran sus modelos de evaluación de riesgos, tienden a influir en cómo los actores tradicionales asignan recursos, incluida su exposición a clases de activos emergentes.