Recientemente, el ámbito global de los Activos Cripto ha sido sacudido por una acción de aplicación de la ley transnacional de magnitudes sin precedentes. El Departamento de Justicia de EE. UU. (DOJ) y el Departamento del Tesoro, junto con las autoridades británicas, han lanzado un ataque contundente contra un enorme imperio de estafa de pig butchering basado en Camboya y liderado por chinos.
Esta acción no solo reveló una oscura red que integra la trata de personas, el trabajo forzado y el fraude financiero de alta tecnología, sino que también condujo a la mayor confiscación de activos cripto en la historia de Estados Unidos: aproximadamente 127,271 monedas de bitcoin, con un valor estimado de entre 14 y 15 mil millones de dólares según el precio de mercado en ese momento. Este evento no solo destaca la creciente capacidad de las agencias de aplicación de la ley a nivel mundial para rastrear y combatir en la cadena, sino que sus impactos posteriores, en particular la discusión sobre si esta enorme cantidad de bitcoin podría incorporarse a las reservas estratégicas nacionales de Estados Unidos, está generando una amplia atención en el mercado.
Imperio del mal
El objetivo central de esta operación es el “Grupo Príncipe” de Camboya (Prince Group) y su fundador, Chen Zhi (también conocido como Vincent), originario de Lianjiang, Fujian, China, que posee doble nacionalidad británica y camboyana. Según la acusación desclasificada por el Departamento de Justicia de EE. UU., Chen Zhi ha estado desarrollando en secreto su Grupo Príncipe, que aparentemente se dedica a negocios de bienes raíces y finanzas, convirtiéndolo en una de las organizaciones criminales multinacionales más grandes de Asia desde 2015.
La actividad delictiva central de la organización es la infame estafa de “Estafa de pig butchering”. A través de las redes sociales o aplicaciones de citas, contactan a víctimas de todo el mundo para establecer relaciones amorosas o amistades falsas como cebo (es decir, el proceso de “alimentar cerdos”), y una vez que han ganado la confianza, inducen a las víctimas a invertir en plataformas falsas de Activos Cripto controladas por ellos. Una vez que las víctimas han invertido grandes sumas de dinero, la banda desaparece con los fondos, completando así el “asesinato de cerdos”.
Lo que es aún peor es que las actividades fraudulentas del grupo Prince están entrelazadas con graves crímenes de trata de personas y trabajo forzado. Han establecido múltiples “parques de estafa” en Camboya que son como campos de concentración, rodeados de altas murallas y alambres de espino. Cientos de trabajadores traficados de diversas partes de Asia son forzados a participar en actividades fraudulentas, su libertad personal está estrictamente restringida y a menudo son objeto de amenazas violentas e incluso torturas. Los documentos de la acusación revelan que Chen Zhi gestiona directamente estos parques e incluso posee fotos de sus subordinados abusando de los trabajadores, e instruye a sus hombres a ejercer violencia contra los trabajadores “desobedientes”.
Para blanquear los enormes fondos ilícitos obtenidos de la estafa, la red criminal de Chen Zhi utilizó técnicas de lavado de activos cripto extremadamente complejas. Dispersaron y transfirieron los fondos robados a través de múltiples direcciones y servicios de mezcla, y finalmente los convirtieron en Bitcoin y otros activos encriptados de primera línea, depositándolos en una billetera fría controlada por ellos. Estas ganancias ilegales se utilizaron para comprar jets privados, yates, obras de Picasso y otros artículos de lujo de alta gama, viviendo una vida de excesos.
Lucha conjunta transnacional
Esta acción es un ejemplo de cooperación entre Estados Unidos y el Reino Unido. El Departamento de Justicia de EE. UU. ha presentado una acusación penal contra Chen Zhi en el tribunal federal del distrito este de Nueva York, acusándolo de múltiples delitos, incluyendo fraude telefónico y lavado de dinero, y ha iniciado un proceso de confiscación civil de aproximadamente 127,271 monedas de bitcoin en su billetera personal. El Departamento de Justicia de EE. UU. ha declarado que Chen Zhi sigue prófugo y podría estar oculto en Camboya. Si es finalmente capturado y condenado, Chen Zhi, de 37 años, enfrentará una pena de hasta 40 años y deberá entregar todas las ganancias ilícitas.
Al mismo tiempo, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de EE. UU. designó oficialmente al Grupo Prince como “organización criminal transnacional” e impuso sanciones completas a 146 individuos y entidades relacionadas, incluyendo a Chen Zhi, congelando sus activos en EE. UU. y prohibiendo a ciudadanos y entidades estadounidenses realizar cualquier transacción con ellos.
La lista de sanciones incluye empresas y responsables de Taiwán, con tres mujeres taiwanesas no identificadas y nueve empresas registradas en Taiwán, incluidas Lianfan, Ruidu, Boju, Chengshuo, Maiyu, Mingwan, entre otras. Algunas direcciones de las empresas registradas se encuentran en el distrito de Da’an, en la ciudad de Taipéi, y el representante legal es una persona de apellido Lin de Singapur. El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha señalado que estas empresas están involucradas en el proceso de circulación y lavado de dinero. El gobierno de Estados Unidos enfatiza que continuará colaborando con el Reino Unido y otros aliados para combatir las actividades de fraude transfronterizo cada vez más rampantes en el sudeste asiático.
Un golpe más contundente proviene de la Red de Ejecución de Delitos Financieros del Departamento del Tesoro (FinCEN). En virtud de la Sección 311 de la Ley Patriota de EE. UU., FinCEN ha aislado completamente a otro gigante de servicios financieros de Camboya, “Huione Group”, que está muy relacionado con el Grupo Príncipe, del sistema financiero estadounidense. Las investigaciones muestran que Huione Group es un canal clave para el lavado de dinero de organizaciones criminales como el Grupo Príncipe, manejando al menos 4,000 millones de dólares en fondos ilícitos en solo unos pocos años, incluyendo dinero proveniente de estafas de Estafa de pig butchering y ataques de hackers norcoreanos. Esta acción equivale a imponer una “pena de muerte” financiera a Huione Group, cortando por completo su acceso al sistema financiero estadounidense para el lavado de dinero.
El destino final de Bitcoin
Cómo esta sorprendente cantidad de bitcoin fue rastreada y controlada por las autoridades estadounidenses, es una historia llena de suspense. Según informes de las compañías de análisis de blockchain Elliptic y Chainalysis, el origen de esta cantidad de bitcoin podría estar relacionado con un negocio de minería llamado “Piscina de Minería de la Calle” (Lu Bian). Esta piscina fue la sexta piscina de minería de bitcoin más grande del mundo, con operaciones en China e Irán, y su controlador detrás de escena es Chen Zhi.
En 2020, se afirmó que el grupo minero había detenido sus operaciones poco después de que aproximadamente 127,000 monedas de Bitcoin fueran “robadas”. Sin embargo, estas monedas de Bitcoin han permanecido en silencio desde que fueron transferidas. El informe de Elliptic señala que “no está claro cómo estas monedas de Bitcoin cayeron en manos de las autoridades estadounidenses, ni si realmente ocurrió un robo en primer lugar”. Esto ha suscitado especulaciones en el mercado, una posibilidad es que las agencias de aplicación de la ley de EE. UU. hayan descifrado la clave privada de la billetera mediante algún tipo de técnica, o que hayan obtenido el control a través de la cooptación de un insider.
De todos modos, el Departamento de Justicia de EE. UU. ha presentado cargos contra Chen Zhi y ha confiscado más de 127,000 monedas de bitcoin, lo que representa la mayor operación de confiscación de activos cripto en la historia mundial. Esta acción no solo golpeó a una red delictiva transnacional, sino que también envió un mensaje claro al mundo: los activos cripto no son un paraíso para el lavado de dinero, las autoridades pueden rastrearlos, congelarlos y llevarlos a juicio.
Cabe destacar que el foco más llamativo de este evento es, sin duda, el destino final de estas 127,271 monedas de Bitcoin. Según una orden ejecutiva firmada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en 2025, Estados Unidos ha comenzado a establecer la “Reserva Estratégica de Bitcoin” (Bitcoin Strategic Reserve), con el objetivo de incorporar todos los Bitcoins confiscados por el gobierno a las reservas nacionales, en lugar de liquidarlos rápidamente a través de subastas como se hacía en el pasado.
Antes de esta acción, el gobierno de Estados Unidos había acumulado alrededor de 200,000 monedas de Bitcoin a través de múltiples acciones de aplicación de la ley (como Silk Road, el caso del hackeo de Bitfinex, etc.). Si los 127,000 Bitcoins confiscados finalmente se incorporan con éxito, las reservas estratégicas de Bitcoin de Estados Unidos superarían de un golpe las 320,000 monedas, convirtiéndolo en uno de los mayores poseedores individuales de Bitcoin en el mundo, incluso superando la cantidad total de todas las empresas que cotizan en bolsa, como Micro Strategy.
Caso de Money Laundering de Qian Zhimin en el Reino Unido
La acción de Estados Unidos no es un caso aislado. Casi al mismo tiempo, el Reino Unido también anunció un plan para abordar otro gran caso de estafa de Bitcoin. El caso involucra a la ciudadana china Zhimin Qian, quien estafó a más de 128,000 inversionistas en China y luego convirtió ganancias ilegales por valor de aproximadamente 5,000 millones de libras (alrededor de 6,800 millones de dólares) en 61,000 monedas de Bitcoin y huyó a Reino Unido.
Después de que Qian Zhimin fuera condenado, la Fiscalía de la Corona del Reino Unido (CPS) confirmó que está trabajando en un marco de compensación para las víctimas, con planes de indemnizar a las víctimas chinas. Sin embargo, el Reino Unido también busca retener la mayor parte de la enorme riqueza en bitcoin confiscada de los delincuentes. Esta noticia fue anunciada durante una audiencia en el Tribunal Superior de Londres el miércoles, donde el Fiscal General informó a los abogados de las víctimas que podría establecerse un plan de este tipo, aunque los detalles específicos aún no se han revelado.
El centro de la controversia es la confiscación en 2018 por parte de la policía de 61,000 monedas de bitcoin en una mansión en Hampstead, al norte de Londres, con un valor de 6,700 millones de dólares, uno de los mayores casos de confiscación de activos cripto en la historia del Reino Unido. Este caso ha puesto a las autoridades británicas en oposición a aproximadamente 130,000 inversores chinos que sufrieron pérdidas en la estafa, quienes consideran que el gobierno británico no debería beneficiarse de sus pérdidas.
El enfoque del Reino Unido y de los Estados Unidos forma un contraste interesante y refleja que la comunidad internacional está explorando diferentes caminos para abordar el problema de los activos cripto confiscados.
Conclusión
En general, el golpe devastador del Departamento de Justicia de EE. UU. contra Chen Zhi y su grupo de príncipes no solo es una gran victoria para la cooperación internacional en la aplicación de la ley, sino también una severa advertencia para todas las bandas que intentan realizar actividades delictivas aprovechando la anonimidad de la encriptación. Con el aumento de la madurez de la tecnología de análisis de blockchain, el mundo en la cadena ya no es un territorio sin ley.
Esta histórica confiscación de Bitcoin y su posible inclusión en las reservas estratégicas nacionales marca cómo los Activos Cripto están pasando de ser activos marginales al centro de la geopolítica y la estrategia financiera nacional. En el futuro, la forma en que los gobiernos de los diferentes países gestionen y utilicen sus activos encriptados confiscados tendrá un profundo impacto en el panorama financiero global y en la dirección futura del mercado de encriptación.
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¿Estados Unidos confisca 127,000 Bitcoins de un hombre de origen chino y planea incluirlos en la reserva nacional de Bitcoin?
Recientemente, el ámbito global de los Activos Cripto ha sido sacudido por una acción de aplicación de la ley transnacional de magnitudes sin precedentes. El Departamento de Justicia de EE. UU. (DOJ) y el Departamento del Tesoro, junto con las autoridades británicas, han lanzado un ataque contundente contra un enorme imperio de estafa de pig butchering basado en Camboya y liderado por chinos.
Esta acción no solo reveló una oscura red que integra la trata de personas, el trabajo forzado y el fraude financiero de alta tecnología, sino que también condujo a la mayor confiscación de activos cripto en la historia de Estados Unidos: aproximadamente 127,271 monedas de bitcoin, con un valor estimado de entre 14 y 15 mil millones de dólares según el precio de mercado en ese momento. Este evento no solo destaca la creciente capacidad de las agencias de aplicación de la ley a nivel mundial para rastrear y combatir en la cadena, sino que sus impactos posteriores, en particular la discusión sobre si esta enorme cantidad de bitcoin podría incorporarse a las reservas estratégicas nacionales de Estados Unidos, está generando una amplia atención en el mercado.
Imperio del mal
El objetivo central de esta operación es el “Grupo Príncipe” de Camboya (Prince Group) y su fundador, Chen Zhi (también conocido como Vincent), originario de Lianjiang, Fujian, China, que posee doble nacionalidad británica y camboyana. Según la acusación desclasificada por el Departamento de Justicia de EE. UU., Chen Zhi ha estado desarrollando en secreto su Grupo Príncipe, que aparentemente se dedica a negocios de bienes raíces y finanzas, convirtiéndolo en una de las organizaciones criminales multinacionales más grandes de Asia desde 2015.
La actividad delictiva central de la organización es la infame estafa de “Estafa de pig butchering”. A través de las redes sociales o aplicaciones de citas, contactan a víctimas de todo el mundo para establecer relaciones amorosas o amistades falsas como cebo (es decir, el proceso de “alimentar cerdos”), y una vez que han ganado la confianza, inducen a las víctimas a invertir en plataformas falsas de Activos Cripto controladas por ellos. Una vez que las víctimas han invertido grandes sumas de dinero, la banda desaparece con los fondos, completando así el “asesinato de cerdos”.
Lo que es aún peor es que las actividades fraudulentas del grupo Prince están entrelazadas con graves crímenes de trata de personas y trabajo forzado. Han establecido múltiples “parques de estafa” en Camboya que son como campos de concentración, rodeados de altas murallas y alambres de espino. Cientos de trabajadores traficados de diversas partes de Asia son forzados a participar en actividades fraudulentas, su libertad personal está estrictamente restringida y a menudo son objeto de amenazas violentas e incluso torturas. Los documentos de la acusación revelan que Chen Zhi gestiona directamente estos parques e incluso posee fotos de sus subordinados abusando de los trabajadores, e instruye a sus hombres a ejercer violencia contra los trabajadores “desobedientes”.
Para blanquear los enormes fondos ilícitos obtenidos de la estafa, la red criminal de Chen Zhi utilizó técnicas de lavado de activos cripto extremadamente complejas. Dispersaron y transfirieron los fondos robados a través de múltiples direcciones y servicios de mezcla, y finalmente los convirtieron en Bitcoin y otros activos encriptados de primera línea, depositándolos en una billetera fría controlada por ellos. Estas ganancias ilegales se utilizaron para comprar jets privados, yates, obras de Picasso y otros artículos de lujo de alta gama, viviendo una vida de excesos.
Lucha conjunta transnacional
Esta acción es un ejemplo de cooperación entre Estados Unidos y el Reino Unido. El Departamento de Justicia de EE. UU. ha presentado una acusación penal contra Chen Zhi en el tribunal federal del distrito este de Nueva York, acusándolo de múltiples delitos, incluyendo fraude telefónico y lavado de dinero, y ha iniciado un proceso de confiscación civil de aproximadamente 127,271 monedas de bitcoin en su billetera personal. El Departamento de Justicia de EE. UU. ha declarado que Chen Zhi sigue prófugo y podría estar oculto en Camboya. Si es finalmente capturado y condenado, Chen Zhi, de 37 años, enfrentará una pena de hasta 40 años y deberá entregar todas las ganancias ilícitas.
Al mismo tiempo, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de EE. UU. designó oficialmente al Grupo Prince como “organización criminal transnacional” e impuso sanciones completas a 146 individuos y entidades relacionadas, incluyendo a Chen Zhi, congelando sus activos en EE. UU. y prohibiendo a ciudadanos y entidades estadounidenses realizar cualquier transacción con ellos.
La lista de sanciones incluye empresas y responsables de Taiwán, con tres mujeres taiwanesas no identificadas y nueve empresas registradas en Taiwán, incluidas Lianfan, Ruidu, Boju, Chengshuo, Maiyu, Mingwan, entre otras. Algunas direcciones de las empresas registradas se encuentran en el distrito de Da’an, en la ciudad de Taipéi, y el representante legal es una persona de apellido Lin de Singapur. El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha señalado que estas empresas están involucradas en el proceso de circulación y lavado de dinero. El gobierno de Estados Unidos enfatiza que continuará colaborando con el Reino Unido y otros aliados para combatir las actividades de fraude transfronterizo cada vez más rampantes en el sudeste asiático.
Un golpe más contundente proviene de la Red de Ejecución de Delitos Financieros del Departamento del Tesoro (FinCEN). En virtud de la Sección 311 de la Ley Patriota de EE. UU., FinCEN ha aislado completamente a otro gigante de servicios financieros de Camboya, “Huione Group”, que está muy relacionado con el Grupo Príncipe, del sistema financiero estadounidense. Las investigaciones muestran que Huione Group es un canal clave para el lavado de dinero de organizaciones criminales como el Grupo Príncipe, manejando al menos 4,000 millones de dólares en fondos ilícitos en solo unos pocos años, incluyendo dinero proveniente de estafas de Estafa de pig butchering y ataques de hackers norcoreanos. Esta acción equivale a imponer una “pena de muerte” financiera a Huione Group, cortando por completo su acceso al sistema financiero estadounidense para el lavado de dinero.
El destino final de Bitcoin
Cómo esta sorprendente cantidad de bitcoin fue rastreada y controlada por las autoridades estadounidenses, es una historia llena de suspense. Según informes de las compañías de análisis de blockchain Elliptic y Chainalysis, el origen de esta cantidad de bitcoin podría estar relacionado con un negocio de minería llamado “Piscina de Minería de la Calle” (Lu Bian). Esta piscina fue la sexta piscina de minería de bitcoin más grande del mundo, con operaciones en China e Irán, y su controlador detrás de escena es Chen Zhi.
En 2020, se afirmó que el grupo minero había detenido sus operaciones poco después de que aproximadamente 127,000 monedas de Bitcoin fueran “robadas”. Sin embargo, estas monedas de Bitcoin han permanecido en silencio desde que fueron transferidas. El informe de Elliptic señala que “no está claro cómo estas monedas de Bitcoin cayeron en manos de las autoridades estadounidenses, ni si realmente ocurrió un robo en primer lugar”. Esto ha suscitado especulaciones en el mercado, una posibilidad es que las agencias de aplicación de la ley de EE. UU. hayan descifrado la clave privada de la billetera mediante algún tipo de técnica, o que hayan obtenido el control a través de la cooptación de un insider.
De todos modos, el Departamento de Justicia de EE. UU. ha presentado cargos contra Chen Zhi y ha confiscado más de 127,000 monedas de bitcoin, lo que representa la mayor operación de confiscación de activos cripto en la historia mundial. Esta acción no solo golpeó a una red delictiva transnacional, sino que también envió un mensaje claro al mundo: los activos cripto no son un paraíso para el lavado de dinero, las autoridades pueden rastrearlos, congelarlos y llevarlos a juicio.
Cabe destacar que el foco más llamativo de este evento es, sin duda, el destino final de estas 127,271 monedas de Bitcoin. Según una orden ejecutiva firmada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en 2025, Estados Unidos ha comenzado a establecer la “Reserva Estratégica de Bitcoin” (Bitcoin Strategic Reserve), con el objetivo de incorporar todos los Bitcoins confiscados por el gobierno a las reservas nacionales, en lugar de liquidarlos rápidamente a través de subastas como se hacía en el pasado.
Antes de esta acción, el gobierno de Estados Unidos había acumulado alrededor de 200,000 monedas de Bitcoin a través de múltiples acciones de aplicación de la ley (como Silk Road, el caso del hackeo de Bitfinex, etc.). Si los 127,000 Bitcoins confiscados finalmente se incorporan con éxito, las reservas estratégicas de Bitcoin de Estados Unidos superarían de un golpe las 320,000 monedas, convirtiéndolo en uno de los mayores poseedores individuales de Bitcoin en el mundo, incluso superando la cantidad total de todas las empresas que cotizan en bolsa, como Micro Strategy.
Caso de Money Laundering de Qian Zhimin en el Reino Unido
La acción de Estados Unidos no es un caso aislado. Casi al mismo tiempo, el Reino Unido también anunció un plan para abordar otro gran caso de estafa de Bitcoin. El caso involucra a la ciudadana china Zhimin Qian, quien estafó a más de 128,000 inversionistas en China y luego convirtió ganancias ilegales por valor de aproximadamente 5,000 millones de libras (alrededor de 6,800 millones de dólares) en 61,000 monedas de Bitcoin y huyó a Reino Unido.
Después de que Qian Zhimin fuera condenado, la Fiscalía de la Corona del Reino Unido (CPS) confirmó que está trabajando en un marco de compensación para las víctimas, con planes de indemnizar a las víctimas chinas. Sin embargo, el Reino Unido también busca retener la mayor parte de la enorme riqueza en bitcoin confiscada de los delincuentes. Esta noticia fue anunciada durante una audiencia en el Tribunal Superior de Londres el miércoles, donde el Fiscal General informó a los abogados de las víctimas que podría establecerse un plan de este tipo, aunque los detalles específicos aún no se han revelado.
El centro de la controversia es la confiscación en 2018 por parte de la policía de 61,000 monedas de bitcoin en una mansión en Hampstead, al norte de Londres, con un valor de 6,700 millones de dólares, uno de los mayores casos de confiscación de activos cripto en la historia del Reino Unido. Este caso ha puesto a las autoridades británicas en oposición a aproximadamente 130,000 inversores chinos que sufrieron pérdidas en la estafa, quienes consideran que el gobierno británico no debería beneficiarse de sus pérdidas.
El enfoque del Reino Unido y de los Estados Unidos forma un contraste interesante y refleja que la comunidad internacional está explorando diferentes caminos para abordar el problema de los activos cripto confiscados.
Conclusión
En general, el golpe devastador del Departamento de Justicia de EE. UU. contra Chen Zhi y su grupo de príncipes no solo es una gran victoria para la cooperación internacional en la aplicación de la ley, sino también una severa advertencia para todas las bandas que intentan realizar actividades delictivas aprovechando la anonimidad de la encriptación. Con el aumento de la madurez de la tecnología de análisis de blockchain, el mundo en la cadena ya no es un territorio sin ley.
Esta histórica confiscación de Bitcoin y su posible inclusión en las reservas estratégicas nacionales marca cómo los Activos Cripto están pasando de ser activos marginales al centro de la geopolítica y la estrategia financiera nacional. En el futuro, la forma en que los gobiernos de los diferentes países gestionen y utilicen sus activos encriptados confiscados tendrá un profundo impacto en el panorama financiero global y en la dirección futura del mercado de encriptación.